La situación de la sucesión de extranjeros cambió sustancialmente el pasado agosto con la entrada en vigor del Reglamento 650/2012 relativo a la Sucesión Internacional. El texto pretende facilitar y resolver las posibles controversias que puedan surgir en los procedimientos derivados de la herencia de extranjeros residentes o con bienes en España.
¿Si falleciera un ciudadano ingles con hijos y bienes en Reino Unido y España, qué ley deberíamos aplicar a su sucesión? ¿La española? ¿La inglesa? Hasta agosto de 2015, si un extranjero residente en España fallecía, de acuerdo con el Código Civil, aplicaríamos la ley del Estado del que tuviera la nacionalidad. Por lo tanto, acudiríamos a la ley inglesa.
La elección de la ley a aplicar es un tema importante puesto que según el Derecho inglés, los ciudadanos tienen el derecho a dejar sus asuntos en manos de quienquiera que sea. En cambio, según el Derecho español, los ciudadanos tienen derecho a instituir como herederos a quienes quieran salvando un porcentaje que deberán dejar obligatoriamente a determinadas personas (cónyuge, hijos, etc.).
Con el Reglamento europeo el criterio dejará de ser el de la nacionalidad en el momento del fallecimiento para ser el de la residencia habitual. Con ello, si un extranjero fallece en España teniendo su residencia en dicho Estado, la ley aplicable será la española salvo que hubiera determinado antes de su muerte qué ley quería que fuera aplicada a su sucesión.
Para prevenir cualquier tipo de problemas sobre las personas instituidas como herederas y para asegurar que su patrimonio es organizado según sus preferencias y no según leyes internacionales, el mejor consejo que podemos darle es otorgar testamento. Otra posibilidad es que deje expresa constancia de que quiere que le sea aplicada la ley del país del que es nacional para regir su sucesión.
Por todo ello, le recomendamos que acuda a un abogado experimentado que pueda estudiar su caso en particular y le aconseje cuál es la mejor vía de actuación. En HV abogados estaremos encantados de informarle y guiarle en todo el proceso, además de la elaboración de su testamento o la modificación de éste.